Ella es una chica normal, con defectos y virtudes como las demás.
Busca a diario la felicidad, encontrándose con lo dura que es la realidad.
Ella sonríe a los demás, llora en silencio y ama de verdad.
La luna ha sido testigo de como se enamoraba por primera vez y de como el corazón se le encogía cuando fracasaba sin ella querer.
Esa chica normal...
Esa chica normal soy yo.
martes, 28 de agosto de 2012
jueves, 16 de agosto de 2012
3:15 de la madrugada...
Mira la hora que es y yo sin poder dormir...
¿En qué pienso? Eso no lo voy a desvelar aquí.
No es necesario sentirme así, odio la sensación de que mi cuerpo no tenga ganas de nada...
¿En qué pienso? Eso no lo voy a desvelar aquí.
No es necesario sentirme así, odio la sensación de que mi cuerpo no tenga ganas de nada...
Aquel día...
Cada gota de lluvia que vi caer, era como ácido aquel día.
No sabía distinguir entre tus lágrimas y el agua caída que impregnaba toda tu cara.
Quizás debería haber llevado mi equipaje cargado de pastillas que evitaran todo tu dolor.
Ahora, aunque no lo creas, las mañanas son diferentes. Acostumbrarme a esta nueva etapa duele y es complicado, pero es lo mejor para las dos.
Siempre te quise y siempre te querré, aunque ahora sea de manera diferente...
No sabía distinguir entre tus lágrimas y el agua caída que impregnaba toda tu cara.
Quizás debería haber llevado mi equipaje cargado de pastillas que evitaran todo tu dolor.
Ahora, aunque no lo creas, las mañanas son diferentes. Acostumbrarme a esta nueva etapa duele y es complicado, pero es lo mejor para las dos.
Siempre te quise y siempre te querré, aunque ahora sea de manera diferente...
Hace tiempo que...
Hace tiempo que no escribía...
Meses, hacía meses.
He estado en la cuerda floja con mis sentimientos y aún, a día de hoy, no sé ni como los tengo.
Ella sigue ahí, imparable, como una nube de polvo de la que no puedes escapar.
La otra, ahí también, como siempre, con su filosofía de niña inocente.
Y ahí sigue, día tras día.
Decepciones, llantos, risas, cariño, nervios, enfados... todo eso ha pasado en este tiempo.
Haría falta un cuaderno para contarlo todo.
¿Sabes lo que necesito?
Huir, aunque suene cobarde...
Meses, hacía meses.
He estado en la cuerda floja con mis sentimientos y aún, a día de hoy, no sé ni como los tengo.
Ella sigue ahí, imparable, como una nube de polvo de la que no puedes escapar.
La otra, ahí también, como siempre, con su filosofía de niña inocente.
Y ahí sigue, día tras día.
Decepciones, llantos, risas, cariño, nervios, enfados... todo eso ha pasado en este tiempo.
Haría falta un cuaderno para contarlo todo.
¿Sabes lo que necesito?
Huir, aunque suene cobarde...
Eres como la brisa de verano...
Llegas cuando menos lo esperas y resultas agradable, es más te acostumbras a estar a gusto y bien. Y de repente, cuando mejor estás, vas apareciendo menos o te vas y es difícil volver a encontrarte igual que la misma sensación de la primera vez. Pero mientras estás eres muy muy agradable...
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